Un alacrán y un sapo se encuentran en la orilla de un río, y el alacrán le pide al sapo que lo lleve en su lomo para cruzarlo. El sapo le pregunta, "¿Y como yo sé que no me vas a picar con tu ponzoña?" El alacrán le responde, "Porque si lo hago, yo moriría también."
El sapo se convence, y comienzan a cruzar el río, pero a mitad del camino, el alacrán pica al sapo. El sapo comienza a sentir la parálisis y se empieza a hundir, sabiendo que ambos se ahogarían, pero aún le quedaban fuerzas para preguntar "¿Por qué?"
Le responde el alacrán antes de hundirse ambos: "Así soy yo...es mi naturaleza"
Fábula de Esopo.
La moraleja de esta fábula es que nadie va a cambiar la naturaleza del golpista que hoy destruye a Venezuela. Este inmoral acusa de golpistas, terroristas y fascistas a todos los ciudadanos de este país que se oponen a su diarrea ideológica, a sabiendas de que el único que ha incurrido en ese delito ha sido él, con graves consecuencias como la muerte de personas inocentes y la destrucción de bienes del patrimonio nacional.
Por cierto que ni siquiera con el corto período que pasó preso, llorando todos los días, escribiendo cartas y llamando a desconocer al poder judicial, pudo pagar por todo el daño realizado.
Pero como reza la fábula, su naturaleza está asociada con la maldad y la destrucción de todo lo que le rodea. Es así como en este último mes del año, actuando con la más descarada ilegalidad ha cometido una serie de tropelías tendentes a "blindar" su próxima arremetida para este nuevo año, en el cual pretende terminar de cumplir las órdenes que recibe del genocida Fidel Castro y así implantar definitivamente, según su creencia, el aberrante y caduco proyecto comunista por demás inviable.
Esa naturaleza de golpista, lo lleva una vez más a violar a la Constitución y a dar un nuevo Golpe de Estado. Se trata de magnificar el estado paralelo que ya existe y de dejar como cascarones vacíos a los gobiernos regionales y municipales. De relevar de sus funciones a la Asamblea Nacional para crear las leyes que más le convengan, sin justificación moral ni política alguna. En resumen hacer lo que le venga en gana y sin importarle un átomo la aceleración de este proceso destructivo que se manifestará principalmente en el área financiera y en el área social.
Esto significa que no tenemos más opción que la de oponernos de manera firme y contundente, en forma directa y sin eufemismos a un demente que nos quiere destruir.
Por eso tenemos que precisar que el único camino para lograrlo es la verdadera unidad, mediante la aplicación de estrategias continuadas y coherentes, mediante un plan cuyo cumplimiento nos garantice el éxito. Siempre he denominado a esta operación "Fuenteovejuna" todos a una señor. Eso debemos hacerlo, sin protagonismos políticos y acomodaticios, con el propósito claro y definido de salir de una vez por todas de este sujeto que carece de legitimidad de origen y de desempeño, bien entendido por aquellos que conocen bien como se mantiene en el poder desde el fraude del referendo revocatorio.
No queda mucho tiempo. Tenemos que acumular energía, coordinar las actuaciones y proceder. Es nuestro derecho y nuestro deber activar los mecanismos de auto defensa y protección de la Constitución y eso pasa por la desobediencia legítima de un pueblo que se niega a vivir en la esclavitud y bajo libertad condicional.
EBR