jueves, 15 de marzo de 2012

Magistrado Aponte, verdugo no pide clemencia.

No voy a tratar de explicar lo relacionado con el sonado caso de los "para cachitos" porque ya conocen sobre ello. Lo más significativo es que este evento fue tomado por Eladio Aponte Aponte, como una bandera para lograr sus aspiraciones de ser un magistrado de eso que llaman el TSJ. 
En efecto, después de una suprema demostración de rastacuerismo ("como el afán de grandiosidad, sin grandeza.") y de una extrema adulancia y sumisión a los intereses del régimen, logró involucrar a personas inocentes en hechos con los cuales nada tenían que ver. Esa actuación lo condujo por el camino del estrellato y lo colocó con la bendición del sátrapa, en el lugar deseado, por cierto sin cumplir con los requisitos y méritos exigidos.
Hoy se discute si este magistrado cometió o no un hecho reñido con la legalidad, como la "tontería" de otorgarle (por x medios) una credencial a Walid Makled. Pero, acaso ¿esto es una novedad en este régimen y en sus más notorios integrantes?. Por supuesto que no. Peores cosas han pasado, como contrabandos, tráfico de drogas, robo del tesoro público, malversaciones, tráfico de dólares, financiamiento sucio de campañas presidenciales externas, entrega de la patria a países extranjeros, corrupción como jamás ha existido, financiamiento a grupos terroristas internos y externos. Todo esto repito no es nuevo y ha sido notorio, público y comunicacional. Eso si, no hay denuncia que valga porque los otros pseudo poderes están genuflexos al servicio de un individuo que previa recepción de las órdenes de Cuba, los maneja a su antojo. De alguna manera el hoy caído en desgracia Makled, estuvo o está relacionado con muchas de las actividades ilícitas nombradas y también mucha gente "pesada" que antes lo abrazaban y lo protegían, tanto civiles como militares.
Entonces ¿por qué ahora contra Eladio Aponte? El simplemente aprendió de sus maestros rojitos y pensó que otorgarle una credencial a este "caballero" (me imagino que le daban el mismo trato que al asesino de Altamira, Gouveia), no representaba gran cosa.
No obstante, magistrado Eladio Aponte, esto que le sucede le demuestra, que los rojos rojitos cuando quieren sacar a alguien del medio, se inspiran en el asesino Fidel Castro, quien si sabe de ello. Makled aún puede ser peligroso, sencillamente se quieren deslindar y decirle al país que si están poniendo orden al respecto.
De todas maneras, le sugiero al magistrado que no se aflija, que no ponga cara de tragedia como en la fotografía, porque simplemente está recibiendo una cucharada de su propia medicina y que jamás olvide que "verdugo no pide clemencia"